
O cuando fui a conocer los paisajes de Capadocia y Estambul, que maravilla, 8 días fantásticos por sólo 520€, vale, en realidad fueron más de 1.040€ porque en aquella época conocí a una chica y con tal de llevármela a la cama yo hacía lo que hiciera falta, y si había que ir a Estambul uno se iba a Estambul...
También recuerdo ahora un crucero con unos amigos por el Caribe, La Habana, Cancún y Cozumel, aquello si que fue a todo trapo, en la Suite de lujo con su terracita que tenía, y que decir del barco, creo que es uno de los mejores cruceros del mundo, el caso es que pillé una oferta y por 2.599 € ahí que me pegué 7 días cojonudos, si es que soy un hacha.

Total, que visto lo visto, lo mejor será que me vaya al Sahara de vacaciones, eso si, sin agua, sin comida y sin brújula ni nada que se le asemeje, así que si no nos volvemos a ver, ya sabéis. ¡Adiós!
3 comentarios:
Ains! que mal cuerpo me has dejado!!
Y eso que yo, ni siquiera me voy de vacaciones...
Besos.
Vale, suicida, me haces sentir culpable. Me suicidaré de nuevo. Pero tengo justificación, cómo no. Trabajo, trabajo mucho y para volver, con ganas, necesito no hacer nada... respirar un poco el mar, estar relajada con mis hijos, que seguro que también me necesitan sonriente y no con cara de perro siempre...
El que no se justifica es porque no quiere. Pero me siento culpable, sí señor.
Y anónima, los niños saharauís, a pesar del agua, del primer mundo, de las piscinas... quieren volver con sus papis, a tí y mí también nos pasaría. Besos.MJ
A veces te puedes sentir culpable, de poder hacer o tener cosas que otras ni sueñan. Pero es que, querido suicida, la vida es asi de injusta. Y seguramente para que uno este bien, otro tiene que estar mal. Un asco, pero nadie dijo que esto fuera a ser facil...
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